Los Objetivos del control
El control tiene como propósito detectar errores y desviaciones a tiempo, para corregir las fallas en el momento justo aplicando los mecanismos adecuados. Y para que sea efectivo, debe cumplir con las siguientes características:
A. Ser oportuno. Si lo ideal es detectar las desviaciones antes de que ocurran, la función del control es informar de inmediato cualquier situación.
B. Ser accesible. Las medidas que se establezcan deben ser de fácil entendimiento.
C. Ubicarse. Los controles no se pueden establecer en toda la empresa, por lo que se deben ubicar estratégicamente en las áreas.
D. Reflejar a la organización. Los controles que se implementen deben estar acordes con el tamaño y necesidades de la organización.
Dentro del control, el concepto de norma es fundamental, por lo que es importante definirlo.
La norma es la unidad de medida cuya finalidad es servir de modelo para evaluar los resultados obtenidos. Las normas pueden ser cuantitativas y cualitativas.